• Acerca de

AMANECE EN MERCURIO

AMANECE EN MERCURIO

Publicaciones de la categoría: Sin categoría

Coronavirus, de la ola al tsunami

18 lunes Ene 2021

Posted by Time Advocate in Sin categoría

≈ Deja un comentario

Parece ser que en la serie «Chernobyl» (magnífica, por cierto), lo más impactante fue ver cómo iban liquidando, casa por casa, todas las mascotas que estaban contaminadas.

Daba igual que murieran seres humanos, que nacieran bebés con malformaciones, que la mierda esa que salió de esa explosión pueda ser la explicación -décadas después- a tanto cáncer en personas jóvenes (mira a tu alrededor: seguro que conoces a alguien con cáncer y a ese alguien se lo diagnosticaron con menos de 50 años). Es lo mismo. Estamos anestesiados.

Pero ver cómo mataban a una perrita y a sus cachorros… pordiosbendito, qué duro, ¿no?

Augusto, el emperador romano, lo dijo una vez: «Pefiero ser un cerdo de Herodes a ser un hijo de Herodes».

Bueno. El caso es que con lo del Covid19 está pasando lo mismo. Todos los días, TODOS LOS DIAS repito, mueren cientos de personas en España. Y a nadie parece conmoverle.

Pues, si eso no sirve, imaginen que cada día sacrifican cuatrocientas mascotas, adorables e inocentes cachorrillos, como ese de color canela que jugaba con el papel higiénico… ¿Se lo imaginan?

¡Bang! ¡Bang! ¡Bang!… cuatrocientos “bangs”.

Y, una vez terminada la faena, ponemos todos los perritos muertos, en fila. Una y otra vez. Cada día lo mismo.

Parafraseando aquel viejo anuncio de muebles: «si este texto tuviera imagen, imagínesela».

Y ahora cambie la imagen de los perros por la de personas, con su familia, sus vivencias, sus recuerdos y con una vida por delante.

A ver si por ahí entramos ya en razón.

Que ya no caben más tontos por las puertas de las UCI.

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DÍA SESENTA Y SIETE

20 miércoles May 2020

Posted by Time Advocate in ORGANIZACIÓN, PRÁCTICA JURÍDICA, Sin categoría

≈ Deja un comentario

Etiquetas

COCODRILO, HACIENDA, HURACÁN, TSUNAMI

Si no pasa nada, se aprueba hoy la última prórroga del estado de alarma, la de este tiempo suspendido que toca a su fin; el Gobierno ha fijado el día 1 de junio, para reanudar los plazos administrativos, y el 4 de ese mes, para los procesales.

Es la hora de ir haciendo balance.

En mi caso, contabilizo nada menos que veintidós juicios suspendidos y eso que, por medio, tuvimos dos semanas de «vacaciones». A ello únele los nuevos asuntos que han entrado.

Tocará apretarse en el futuro.

Por si acaso, como en el cuento del leñador, aquí seguimos afilando el hacha.

Ese es el ruido de fondo que se oye detrás de la puerta de mi despacho: zas, zas, zas… el del mantenimiento de herramientas (gestión de la calidad, renovación de la marca, las «cosas» informáticas).

Calafatear el barco y coser las velas no son tareas tan vistosas como la de orzar en mar abierto; pero lo uno no se entiende sin lo otro.

Día gris, anodino. Pero necesario.

Y con un ojo puesto en el cocodrilo de Hacienda.

Como pasa después de un tsunami, como sucedió después del huracán «Katrina», los tendremos rondando entre nosotros, a la caza de incautos.

Porque va a hacer falta dinero, mucho dinero.

 

 

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DIA CINCUENTA Y NUEVE

12 martes May 2020

Posted by Time Advocate in PRÁCTICA JURÍDICA, Sin categoría

≈ Deja un comentario

Etiquetas

CINCINATTI, CINCINATTO, DICTADURA, ESTADO DE ALARMA, PRÓRROGA, ROMA

¿Otra prórroga más para el estado de alarma?

¿Y qué tal si en lugar de quince dias pedimos un mes entero? Ya puestos…

En el año 458 a.C. la ciudad de Roma estaba rodeada por ejércitos enemigos. Entre sus ilustres vecinos («ciudadanos») destacaba uno que se llamaba Lucio Quinto Cincinatto, austero y de costumbres puras, que fue elegido para que dirigiera las tropas, otorgándole el cargo de dictador. Esto es, para dirigir las legiones con un poder absoluto.

Los representantes del Senado fueron a buscarle a su hacienda -donde estaba trabajando en su huerto- y él aceptó la toga roja: el símbolo del dictador.

En apenas dieciéis días, Cincinatto organizó las tropas y venció a los enemigos, entregando el cargo al Senado (la toga roja) y volviendo a su actividad agraria.

Cuenta la tradición que, años después, el Senado tuvo que volver a nombrarlo como dictador. Eso ocurrió en el año 439 a.C., y esta vez fue para defender la República de una traición, a lo que el bueno de Cincinatto respondió cumpliendo -de nuevo- a la perfección su cometido… y volviendo después a su huerto.

Su historia se ha venido recordando desde entonces, hasta el punto de que en Estados Unidos hay una ciudad que lleva su nombre -Cincinnati-, que, dicho sea de paso, también es conocida por tener una de las colecciones más grandes de arquitectura italiana del siglo XIX, o ser el lugar de nacimiento de Steven Spielberg o un tipejo como Charles Manson.

Tenemos un país en el que le pones una gorra a un aparcacoches y se cree mariscal de campo.

Como ya dije hace semanas, confío en mi gobierno porque es quien más información tiene. Y parece que los hechos le dan la razón: ha bajado el número de fallecimientos y de contagios.

Pero es lógico que se recele de una nueva prórroga para el estado de alarma, sobre todo cuando se pide nada menos que para ¡un mes!  Dos quincenas de una tacada.

Con un empujoncito mas, empalmamos con las vacaciones de agosto (parece que los que están a favor de cerrar los juzgados se van a salir con la suya).

Y «ya si eso», empezamos a hacer juicios en septiembre. Como los malos estudiantes.

Seguiremos antentos a la pantalla.

Cincinato

 

 

 

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DÍA CUARENTA Y CUATRO

27 lunes Abr 2020

Posted by Time Advocate in PRÁCTICA JURÍDICA, Sin categoría

≈ Deja un comentario

Etiquetas

CIEZA, DAMOCLES, MOLINA DE SEGURA, MURCIA, PRÁCTICAS, SICILIA, toga

Quienes han pasado por mi despacho a hacer prácticas recordarán que lo primero que hago es llevarlos a la sala de juntas, donde tengo colgada la toga, para -acto seguido- hacerles una foto con ella puesta.

–«Ale -les digo- por si al final eres o no abogada, no te quedes con el hipo dentro». Y les invito a que le manden la foto a su mamá o a su pareja. O la cuelguen en Instagram, si les apetece.

Está claro que el hábito no hace al monje y vestir «la bata negra» (como la llama la abuela de una buena amiga), o el «traje de Batman» (como también se le conoce por los ambientes), no te convierte en abogado.

Hoy he leído que entre la batería de medidas que propone el Ministerio de Justicia para recuperar el tiempo perdido durante esta crisis será permitir celebrar juicios sin toga. Imagino que están pensando en los que no tienen una propia y las cogen prestadas en el servicio que cada colegio tiene habilitado al efecto.

Un servidor, que antes de que el virus campara por sus respetos ya tocaba las botoneras de los ascensores con la llave del coche, por el mismo escrúpulo se compró -en cuanto pudo- una toga hecha a medida aprovechando un viaje a Madrid. Entonces ya me precupaba contagiarme de cualquier cosa (no solo de un virus), porque había que ver en qué condiciones te dejaban las togas compartidas (sobre todo en verano). La toga que tengo ahora es mi segunda toga, pero esa no es una historia para contarla por aquí.

El caso -decía- que a mis pupilos les pongo mi toga y luego los llevo «pegados a rueda» a hacer juicios, comparecencias, asistencias a detenidos, visitas a organismos públicos y, por supuesto, cuando ello no cause problema, atendemos a los clientes juntos, para que aprendan a analizar los casos tan cual nos los cuentan y no como les plantean los casos prácticos en su universidad.

Debe ser que, al venir de una familia de docentes (por parte de padre y de madre, de abuelos paterno y materno, tíos y demás familia, como en las esquelas), algo de afición a la didáctica me ha quedado. Por eso y, también, porque es lo que yo quise en su día para mí cuando hice mis prácticas.

En general lo pasamos bien, se acoplan al ritmo y hasta nos echamos unas risas. Alguna vez, incluso, los he subido a estrados para que sientan el vértigo de la profesión, más allá de la idea que se traen de las películas que han visto.

Me gusta jugar con ellos a una suerte de juego que podría llamar «La Toga de Damocles», para que sientan el peso de ese trapo negro; que a veces pesa y mucho.

Damocles era un cortesano que iba diciendo por ahí de Dionisio I, tirano de la ciudad de Siracusa (hablamos por supuesto de Sicilia, siglo IV a.c.; como en las Chicas de Oro), que era un tipo muy afortunado, porque disponía de riqueza y de poder. Dionisio, que tenía muy mala leche, le quiso dar un escarmiento y se ofreció a intercambiarse con él por un día, de forma que pudiera disfrutar de primera mano de su supuesta «suerte». Esa misma tarde se celebró un banquete donde Damocles gozó siendo servido como un rey. Al final de la comida se le ocurrió mirar hacia arriba y reparó en una afilada espada que colgaba sobre su cabeza, atada por un único pelo de crin de caballo.

Inmediatamente se le quitaron las ganas de comer y menos de retozar con las hermosas mujeres que había pedido, así que pidió al tirano abandonar su puesto, diciendo que «ya no quería seguir siendo tan afortunado».

Una vez se me tuvo que ir mucho la mano con mi juego. Esa mañana habíamos estado en Molina de Segura, en una comparecencia; luego nos fuimos a Cieza a otro señalamiento y luego volvimos a Murcia, autopista para abajo, para intentar llegar a tiempo y presentar unos escritos por registro. Al terminar la jornada la chica que entonces estaba en prácticas me dijo:

-Jose, espero que no te moleste, pero tengo que hacerte un comentario.

-No te preocupes, dispara.

-Verás, estoy observando el ritmo que llevas, las llamadas, las visitas, los plazos y los juicios. Creo que no voy a ser abogada. Es que… no me gusta tu vida.

-No te preocupes -le contesté-. A veces a mi tampoco me gusta.

Semanas después esta chica dejó el despacho para hacer prácticas en una empresa, nada que ver, por supuesto, con el ejercicio profesional; y, cuando escribo estas líneas, me consta que le va muy bien por Madrid. Por supuesto, lejos de cualquier cosa que huela a estrados o a la toga de Damocles.

 

IMG_2568

Foto: de la toga de Damocles a la toga NBQ

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DÍA CUARENTA Y UNO

24 viernes Abr 2020

Posted by Time Advocate in INSPIRACIÓN, ORGANIZACIÓN, Sin categoría

≈ 2 comentarios

Etiquetas

CRESO, DELFOS, HERÓDOTO, MILONGA, SEÑALES, TANGO

A primera hora arranco el motor y en el salpicadero de mi coche no se me enciende la luz que semanas atrás me avisaba de un problema con el colector de gases. ¿Es posible que con la atmósfera más limpia se haya purgado la carbonilla?

Esa señal -o mejor dicho, su ausencia- me arranca la primera sonrisa del día. A veces, solo a veces, es mejor dejar que las cosas se arreglen por sí solas. En otras ocasiones, en cambio, puede resultar catastrófico.

Al salir del trabajo observo que han aprovechado la mañana para repintar las señales de la avenida. Después de tanto tiempo las veo de otra manera. Las flechas que indican el sentido de la marcha también ordenan la vuelta a casa. Nada de aperitivos. Nada de tapeos.

Hoy es otro viernes que no es viernes. Es la dictadura del tiempo suspendido.

Pero son señales que pueden interpretarse, también, como de esperanza: «Están engalanando las calles -me digo- para cuando podamos desfilar, triunfales, por ellas». Ya queda menos.

Del otro lado de la frontera, en otras latitutes, me contaron que el camino de ida y vuelta a casa se transita de otra manera. Nada de avenidas rectas. Allá se conduce abrazado a la línea de la costa, con la mirada fija en los destellos de los faros. Han sido muchos días soportando sus guiños, semanas resistiendo sus señales. Demasiadas.

De Ultramar me llegan noticias de que algunos dirigentes supieron dar la orden de confinamiento a tiempo. Otros, en cambio, han dejado el cuerpo muerto y la población paga las consecuencias. Son noticias que me suenan a crónica de otros tiempos.

Como por ejemplo, las de la Orquesta Romántica Milonguera. Recuerdo que una vez me dijeron lo importante que son las marcas en los tangos. Incluso antes de que saques a nadie a bailar. Basta con una simple mirada, con un leve gesto en la barbilla. Aprende pronto el ritual, te avisan. Atento a las señales. Cuidado con a quien señales.

Y cuidado, también, con lo que te encuentras cuando buscas señales.

Heródoto nos cuenta que una vez el oráculo de Apolo, en Delfos, le dijo a Creso: «Si cruzas el río Halys, un gran ejército será destruido». Este rey creyó que era un anuncio de victoria, la suya. Pero lo cierto y verdad es que fue derrotado por Ciro, y el ejército que fue destruido fue el suyo.

En España se habla ahora de que en febrero había indicios de enfermos contaminados con el bichito que pasaron inadvertidos por no haber aplicado los protocolos. Que se trataron como gripes corrientes. Y que no hubo un solo foco de infección, sino varios.

Las señales son objetivas, neutras. La vida te las plantó ahí para que las vieras a la ida, sí, pero sobre todo a la vuelta, cuando llega el momento del conocimiento retrospectivo.

No tienen ideología, ni género; tampoco sentimientos ni remordimientos.

Como el oráculo de Delfos.

 

 

 

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DÍA VEINTISIETE

10 viernes Abr 2020

Posted by Time Advocate in INSPIRACIÓN, MOTIVACIÓN, Sin categoría

≈ 1 comentario

Etiquetas

BELLEZA Y FRAGILIDAD, COSMONAUTAS, DESCOMPRESIÓN, INGRAVIDEZ, LIBRO NEGRO DEL EMPERENDEDOR, LUNA, MIGUEL ANGEL HERNANDEZ, NAZARENOS, REY LOBO, SUBMARINOS, TRIAS DE BES

El vigésimoséptimo día de este tiempo suspendido empieza a ritmo de tambor destemplado. Esta vez no se han esperado a la hora de los aplausos. Es Viernes Santo y, por lo visto, tengo un vecino nazareno. Nazareno y motivado.

Lo escucho desde mi terraza mientras me desperezo y le doy los buenos días al Rey Lobo. Además de una aleta de tiburón, como dije ayer, Monteagudo semeja de lejos también la torreta de un submarino. Y el Santo, su periscopio.

Y hablando de submarinos.

Me acuerdo de lo que contaba el economista Trias de Bes («El libro negro del emprendedor»), que ya nos previno de los socios: si necesitas capital, dijo, mejor pide un préstamo; si necesitas mano de obra, contrata operarios. Pero si, por lo que sea, no puedes prescindir de ellos, antes de iniciar cualquier negocio intenta imaginarte cruzando el Atlántico con los posibles candidatos … encerrados en un submarino.

Noto que a estas alturas de confinamiento está afectando la presión. Sobre todo desde ayer, en que se confirmó lo que algunos ya sabíamos: que esto va para largo.

En una charla retransmitida por Instagram (mi primera vez, aquí queda consignado), escucho esta tarde al escritor Miguel Ángel Hernández decir que lo único que tenemos que hacer es estar en casa y preocuparnos solo de que «no se nos vaya la pinza». Tiene razón.

Navegar en un submarino, sin tener referencias de fechas, o si es de día o de noche, tiene que afectar al cuerpo y a la mente. Y no digamos ya a las relaciones interpersonales. Así que me da igual que sea Viernes Santo. Como si es lunes. El despertador suena a la misma hora e intento mantener una rutina: un tiempo para la lectura, otro para el trabajo, otro para el ejercicio físico, otro para la formación y otro para las llamadas… A veces hasta me acuerdo de comer. Pero no dejo que «se me vaya la pinza».

Como ejemplo me vale el del submarino, pero también podría ser el de una estación espacial o una expedición científica en la Antártida. Los cenizos me dirán que esa gente está preparada, que lo hacen de forma voluntaria, que es su elección… Bueno, yo con cenizos no querría ni ir al supermercado de la esquina. Y menos en un submarino. Por si se les va la pinza y empieza a molestarles que me deje la tapa del váter abierta. O miguitas en la encimera de la cocina. Mejor solo.

Hay gente que te dice que no aguanta más; que está deseando salir y recuperar su vida pasada (qué ilusos). No sé si estamos preparados para gestionar la fase de descompresión.

Porque tampoco va a ser fácil. Los buzos que regresan muy rápido a la superficie corren el riesgo de sufrir un síndrome de descompresión. Y a los cosmonautas recién aterrizados los tienen que coger en brazos; que de tanta ingravidez se les encogieron los músculos de las piernas.

Sea lo que sea, ya se verá. No tengamos prisa.

Y quedémonos con la parte positiva de esta historia, que también la tiene.

Que al volver a la Tierra podamos decir que desde nuestro confinamiento la vimos como algo bello y frágil a la vez. Al menos así lo han contado quienes han tenido la suerte de verla desde la Luna.

Belleza y fragilidad. Eso es lo que veo todos los días desde que me levanto hasta que me acuesto.

 

 

 

 

 

 

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DIA TRECE

27 viernes Mar 2020

Posted by Time Advocate in Sin categoría

≈ 3 comentarios

Y como hacen los presos en sus cárceles, vamos añadiendo palitos en la pared. Con este de hoy, llevamos ya trece.

Dicen que trece es el número de la mala suerte. Pero depende de dónde lo digas. En Vietnam, como en el resto del Este de Asia, la fobia es con el número cuatro. Lamento no tener memoria para eso, pero no recuerdo en este momento si en los hoteles en los que me alojé figuraba el piso cuatro entre los números del ascensor. La verdad es que estaba más pendiente de subir a la piscina de la última planta que de otros detalles.

El actual skyline de Hanoi no tiene nada que envidiar a los de otras grandes urbes, jalonado de torres y más torres en construcción que pugnan entre sí por ser la más alta.

Me acordé, entonces, de las torres de San Gimignano, en La Toscana, el pueblecito italiano que los cursis llaman «el Manhattan del medievo». Y me acordé porque, en el fondo, no deja de ser siempre la misma historia repetida siglos tras siglos: ese tipo de torres representan el orgullo, la soberbia… el poder.

Durante años, sin embargo, el «alojamiento» más famoso de todos era el llamando «HANOI HILTON HOTEL», nombre que le pusieron a la cárcel de Hoa Lo los prisioneros estadounidenses en «su» guerra de Vietnam. Y digo «su» guerra porque los vietnamitas han tenido varias: chinos, franceses, norteamericanos… Y de todas salieron adelante, no sin grandes sacrificios. Todo un ejemplo para nosotros en las actuales circunstancias.

Como también lo fue, todo sea dicho, el comportamiento de algunos ilustres prisioneros de guerra americanos, como Charles PLUMB (seis años preso), cuya historia conté aquí hace tiempo y puede consultarse en esta entrada de mi blog. O la de Jeremiah DENTON (ocho años preso), conocido porque, al ser obligado a realizar una conferencia televisada como prisionero de guerra, aprovechó la oportunidad para confirmar que estaban siendo torturados y para ello parpadeó varias veces sus ojos durante la entrevista, deletreando en código morse la palabra T-O-R-T-U-R-E (Tortura).​ No puedo dejar de citar, tampoco, al ya fallecido senador McCAIN, quien a punto estuvo de ser Presidente de los Estados Unidos y estuvo nada menos que cinco años preso.

Todos tienen en común que salieron adelante. Y para hacerse una idea de las circunstancias que afrontaron, me remito a la película «El Cazador», de Michael Cimino, con Robert de Niro y Cristopher Walken. ¿Quién ha olvidado las escenas del juego de la ruleta rusa?

Pero para películas de prisioneros de guerra, mi favorita, «La Gran Evasión, que para colmo también está basada en hechos reales. Ahora sería un buen momento para revisitarla. Los prisioneros aliados, así se relata, en ningún momento perdieron su dignidad, respetando el rango, la disciplina y hasta celebrando desfiles.

Como paradoja (lo dejo para quien la quiera ver), en ese campo de prisioneros el castigo era lo que llamaban ¡nevera!

Justo lo contrario de lo que nos pasa a los confinados por el dichoso cornavirus y que, después de «hacer inventario» de lo que hay en la mía, mamá por favor, tranquila, atenta al código morse: tengo-para-un-par-de-semanas.

 

 

 

 

 

 

 

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

CORONAVIRUS, DIA UNO

15 domingo Mar 2020

Posted by Time Advocate in INSPIRACIÓN, ORGANIZACIÓN, Sin categoría

≈ Deja un comentario

Etiquetas

CLUB DE LOS POETAS MUERTOS, CORONAVIRUS, ESTADO DE ALARMA, THOREAU, WALDEN

Termino de leer el Real Decreto que establece, por segunda vez desde que se instauró la Democracia en España, el Estado de Alarma. Lo primero que hago -deformación profesional- es apuntar el vencimiento del plazo: quince días naturales a contar desde la fecha de su publicación en el BOE. Quince días de restricciones, quince días de confinamiento domiciliario y quince días en los que se prevé una parálisis de la actividad de todo un país.

El precedente lo tuvimos como consecuencia de una huelga de controladores aéreos. Pero ni de lejos se llegó a tanto. Para dar una idea de la gravedad, sirva como botón de muestra el hecho de que se ha ordenado el cierre de todos los bares a lo largo del territorio nacional. Algo inaudito. Ni siquiera en tiempos de guerra se habría tomado una decisión como esa.

Superado el primer sentimiento de incredulidad y siendo consciente de que estamos ante una situación excepcional, de una catástrofe de la que costará mucho tiempo recuperarse, siento también que me encuentro con un regalo inesperado: durante este tiempo no van a correr los plazos ni tampoco se van a celebrar juicios.

Me dispongo, pues, a vivir una especie de ensoñación, de un espacio-tiempo donde voy a poder seguir moviéndome mientras que todo estará paralizado. Una oportunidad, en definitiva, de poner el reloj a cero, de recuperar -si ello es posible- el tiempo perdido.

No lo afronto como unas vacaciones, ni mucho menos; bien aprovechado, este tiempo podría ser algo mejor que eso. Solo es cuestión de organizarnos.

Como contrapartida, parece que el personal anda un poco revuelto con la idea de renunciar a sus actividades habituales de ocio (del trabajo no se quejan), como si estar en casa fuera una condena, un castigo insoportable.

Y entonces no puedo evitar acordarme de lo que escribió Thoreau en su “Walden”, aquello de que en su casa tenía tres sillas: una para la soledad, dos para la amistad, tres para la compañía. Dependerá de cada cual dónde decida sentarse en cada momento, añado yo.

Thoreau fue un tipo que decidió autoexiliarse a una cabaña para vivir prácticamente solo durante dos años, dos meses y dos días. Y “Walden” era el nombre del estanque donde plantó una choza de pino, donde escribió su célebre diario.

Aunque pudiera parecer un “rarito”, en el siglo XIX, decía cosas tan sensatas como que “los hombres se han convertido en herramientas de sus herramientas” (y eso que no conocía los dichosos teléfonos móviles) o que “nuestras invenciones suelen ser hermosos juguetes que distraen la atención de cosas serias” (tampoco conoció las redes sociales, a saber lo que diría ahora).

Ha llegado el tiempo de centrarse en las cosas serias.

Como, por ejemplo esta tarde, en la que he vuelto a ver “El Club de los Poetas Muertos”. Y, mira por donde, que me vuelvo a tropezar con el bueno de Thoreau y su poema “Fui a los bosques”, que reza así:

«Fui a los bosques porque quería vivir deliberadamente; enfrentar solo los hechos de la vida y ver si podía aprender lo que ella tenía que enseñar. Quise vivir profundamente y desechar todo aquello que no fuera vida…para no darme cuenta, en el momento de morir, que no había vivido».

Quizá para la inmensa mayoría quince días de confinamiento le parezca algo insoportable. En mi caso, creo, me van a parecer muy pocos.

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

SUCEDIÓ HACE UN AÑO (ojo, contiene «spoiler»)

05 domingo Ene 2020

Posted by Time Advocate in Sin categoría

≈ 2 comentarios

¿Que cómo me llamo? Qué más da cómo me llame. Solo soy un negro –un africano, dicen– que se busca la vida en un pueblecito del Norte de España. Bueno, perdón; de España, de España, lo que se dice de España… como que no. Que aquí manda un partido de esos que le llaman “aberchale”; o como se diga. Y aquí, en este pueblo del Norte, de ninguna manera se consideran españoles. “¡Gora Euskadi!” –por si acaso.

Cualquier otro día del año los que están ahí abajo me iba a mirar a la cara. Lo habitual –recuerdo– es que desvíen el rostro cuando se cruzan conmigo. Como si les fuera a morder. “¿Es que nunca habéis visto un negro?”. Pero no, hoy los tengo delante, mirándome como un solo hombre. Debe ser un acontecimiento muy importante porque no ha faltado ni uno. Todo un pueblo esperando a que hable.

Es curioso. Desde que llegué apenas he tenido amigos. Si acaso Iñaki, un borrachín muy simpático que me cruzo cuando vuelvo a casa.

–Me caes bien, me caes bien, tú… –me dice– Y eso que eres negro. Pero mira, prefiero un negro que hable euskera que un puto maketo. Chakurras, que no los soporto, ostia. Pero tú, como te llames, me caes bien –me dice.

Creo que Iñaki se siente igual de solo que yo y por eso busca el contacto. Y es que en este pueblo –del Norte– hace frío. Y suele llover mucho. Dos días de cada tres. Nada que ver con mi tierra. Pero, al menos, con la faena me puedo ganar unas gachas calientes y el derecho a dormir a cubierto.

No soy de los que les gusta crear problemas. Siempre he intentado respetar las normas –como me enseñó mi abuela–. Joder, si hasta he intentado aprender euskera para agradarles. Pero, aquí, eso de integrarse, como que no les va mucho. Por eso me sorprendió que me buscaran ayer tarde. Al principio, con tanta prisa con la que vinieron, pensé que les había molestado algo. Pero no, no era nada de eso. Me dijeron que el que normalmente hace este papel estaba aquejado de gripe y me pidieron el favor de sustituirle. “Por favor”. La primera vez que me pedían algo por favor. “Que la ilusión de los niños no tiene precio y todo eso” –me dijeron.

Ahora estoy subido en el balcón del Ayuntamiento; lo han decorado con la palabra “ZORIONAK”. Antes de venir me han paseado y agasajado vestido como un príncipe llegado del Lejano Oriente. Qué vergüenza. Menos mal que no me ve mi familia.

La ventaja de ser negro –me sueltan– es que no tuvieron que pintarme la cara. Y se quedan tan panchos. Menos mal que no me han pedido el RH.

Ahí los tengo. A mis pies. Ansiosos. Siempre podré decir que mi intento por aprender el puto euskera no me permite manejarme bien con el castellano. O que estaba nervioso. Sí, eso quedará mejor.

Vale. Allá voy:

–»¡QUE SEPAS QUE LOS PADRES SON LOS REYEEEES! VENGAAA. GABÓOOOON».

 

(relato inspirado en esta noticia: https://www.elconfidencial.com/espana/2019-01-05/baltasar-noche-reyes-baltasar-encanto-magia_1741646/)

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...

NI PUTA GRACIA

02 viernes Ago 2019

Posted by Time Advocate in Sin categoría

≈ 2 comentarios

«Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero». Qué gracioso, ¿verdad? O no. La polémica sobre el humor negro no es nada nuevo. Este chiste, publicado en un tuit cuatro años antes de acceder al cargo público, le costó un buen chaparrón de críticas a un concejalillo de Madrid cuyo nombre –afortunadamente para él– ninguno recordamos.

Despedimos la segunda quincena de julio y se me ocurre acercarme a ver un monólogo en el último local de moda, donde me encuentro público mayoritariamente treintañero, gente guapa con ganas de pasar un buen rato y aprovechar que el calor nos ha regalado una tregua.

Por fin empieza el espectáculo. Abre fuego un telonero que cuenta chistes sobre su abuela y no sé qué más cosas sin gracia (chaval, de verdad, intenta ganarte la vida con otra cosa), hasta que se prueba con los Borbones, un chiste con elefantes, escopetas y especulación histórica sobre si el Rey emérito pudo reinar -precisamente- porque mató a su hermano. Como en los toros, hay división de opiniones entre el público, aunque la mayoría le ríe la gracia. Envalentonado, entra a saco con Auschwitz y algunos nos miramos con incomodidad. Afortunadamente, decide cortar y dar paso al artista principal, que no es tonto y ha captado cierto malestar en el ambiente. A lo mejor –pienso– es porque me ha visto el careto, ya que estoy sentado en primera fila.

Se arranca con un mitin y dice que esto del humor se ha complicado mucho, que es mejor contar «chistes sobre hombres», porque «a ellas no les molestan y nosotros no los pillamos». Bien por ti, has estado torero –me digo–. Aunque cuando cuenta un chiste sobre Madeleine (la niña desaparecida en Portugal), nos espeta -tramposo él- que si nos reímos de estas cosas nos convertimos en sus cómplices. Y ahí es donde surge mi incomodidad. Que me haga partícipe de ello.

Cuando vuelvo a casa no puedo evitar acordarme de los chistes que se hicieron a costa de Julen, el niño que murió en un pozo en Málaga, y cuyo autor, humorista tuitero, está siendo procesado por la vía penal.

Como jurista me repugna imaginar que se castiguen delitos «de pensamiento» y creo que el Derecho tiene mecanismos de sobra para prevenir o, en su caso, mitigar, el daño gratuito que se causa a otros semejantes por algo tan estúpido como conseguir un ”me gusta” o una risa fácil. Pero no olvidemos –tampoco– que la chanza supone una nueva victimización que, por si fuera poco, se reproduce “ad nauseam”, merced a las redes sociales. No debería salirle gratis.

En el fondo, creo, es un problema que tiene más que ver con la empatía, la educación y el respeto. Y con la inteligencia (o la falta de ella), porque pocas cosas hya en la vida que respete más que a alguien que se sube a un escenario para hacerte reír o llorar sin más acompañamiento que su ingenio.

Es por ello por lo que seguiré acudiendo a este tipo de monólogos veraniegos, sobre todo para ver si el año que viene alguno de estos “cómicos” tiene huevos a contar chistes sobre violaciones en manada, asesinatos de mujeres (y sus hijos), o a costa de los ahogados en el Mediterráneo.

Y no digamos ya sobre Mahoma. Entonces sí, campeón, ese día te grabo y lo viralizo en redes sociales. Ya verás qué risa nos va a dar a mí y a tu abuela.

Comparte esto:

  • Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
  • Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)

Me gusta esto:

Me gusta Cargando...
← Entradas anteriores

Etiquetas

ASTÉRIX banco basura BESOS BORGES BUENOS AIRES cadenas calidad CINE CORONAVIRUS CORTÁZAR costas DAVID PEACE deontología DESCONFINAMIENTO eficacia esposa ESTADO DE ALARMA extraescolares FACEBOOK fiscalía FRANCIA gestión HACIENDA horas IBN ARABI INTERSTELLAR ITACA JESUS JOBS JUICIOS JULIO CESAR juzgados LEXNET Leónidas libros LORD BYRON LUNA lunes mapas mentales MARCO AURELIO MAR MENOR MEDITACIONES MERCADONA MOLINA DE SEGURA moroso MURCIA MUÑOZ MOLINA OBÉLIX ODISEA ODISEO PALERMO PERROS plazo plazos policía productividad PTOLOMEO Renacimiento REY LOBO ROMA RUTINA SABINA SICILIA Sol STEVE JOBS TANGO TERRAZA TIBURÓN tiempo TINTÍN toga Torre de la Horadada turismo ULISES

CALIDAD EXCELENCIA INSPIRACIÓN MOTIVACIÓN ORGANIZACIÓN PRÁCTICA JURÍDICA Sin categoría

Sígueme en Twitter

Mis tuits

Archivos

  • enero 2021
  • junio 2020
  • mayo 2020
  • abril 2020
  • marzo 2020
  • enero 2020
  • agosto 2019
  • julio 2019
  • junio 2019
  • noviembre 2018
  • julio 2018
  • marzo 2018
  • febrero 2018
  • enero 2018
  • agosto 2017
  • marzo 2017
  • febrero 2017
  • octubre 2016
  • septiembre 2016
  • agosto 2016
  • junio 2016
  • marzo 2016
  • febrero 2016
  • enero 2016
  • noviembre 2015
  • octubre 2015
  • septiembre 2015
  • agosto 2015
  • junio 2015
  • mayo 2015
  • abril 2015
  • marzo 2015
  • febrero 2015
  • enero 2015
  • diciembre 2014
  • noviembre 2014

Blogs que sigo

  • LA GACETA DE ULTRAMAR
  • Caminando por la historia
  • ribas
  • meditantiguo.wordpress.com/
  • La Alétheia de Zorba. Un viaje por la historia del vestido
  • Los colores de la memoria
  • Del Cerro Abogados
  • Quiero ser Compliance Officer
  • Fraude Interno
  • Presunción de inocencia
  • Escritores Independientes
  • Carris's Weblog
  • No quiero otro pijama
  • Mar Carrillo - Marketing Specialist
  • http://dictados-cp523.wordpresstemporal.com
  • Óptima Infinito
  • Personas y Equipos Productivos
  • Du Tudú: GTD y productividad personal
  • Lo que le diga es mentira
  • El Blog de Javier Megias Terol

Sociales

  • Ver perfil de @jramonsaez en Twitter
Follow AMANECE EN MERCURIO on WordPress.com

Introduce tu dirección de correo electrónico para seguir este Blog y recibir las notificaciones de las nuevas publicaciones en tu buzón de correo electrónico.

Únete a otros 822 suscriptores
febrero 2023
L M X J V S D
 12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728  
« Ene    

DUALIS ECONOMÍA GESTION Y DERECHO

Avenida del Rocío Número 16 - 1º C 30007 - Murcia (Spain)
+34 902 90 99 61

Blog de WordPress.com.

LA GACETA DE ULTRAMAR

Crónicas en un tiempo suspendido

Caminando por la historia

ribas

Derecho de las TIC y Compliance

meditantiguo.wordpress.com/

El legado griego

La Alétheia de Zorba. Un viaje por la historia del vestido

Mónica López Soler

Los colores de la memoria

Rutas vitales para viajeros emocionales

Del Cerro Abogados

Despacho de Abogados

Quiero ser Compliance Officer

El camino de un estudiante de ADE en búsqueda de su sueño...

Fraude Interno

Prevención y Detección del fraude interno para cualquier tipo de empresa.

Presunción de inocencia

El Blog de Derecho Penal de Pepe Núñez

Escritores Independientes

Carris's Weblog

El blog de Carris

No quiero otro pijama

Mar Carrillo - Marketing Specialist

Marketing - Comunicación - Ventas - Embajadora Hootsuite EMEA España - Marketing Digital - Transformación digital - Retail - Metaverso - Blockchain

http://dictados-cp523.wordpresstemporal.com

Óptima Infinito

Personas y Equipos Productivos

Web de Alberto Barbero

Du Tudú: GTD y productividad personal

GTD, productividad personal y aplicaciones web

Lo que le diga es mentira

El Blog de Javier Megias Terol

Innovación estratégica y Modelos de Negocio

Privacidad y cookies: este sitio utiliza cookies. Al continuar utilizando esta web, aceptas su uso.
Para obtener más información, incluido cómo controlar las cookies, consulta aquí: Política de cookies
  • Seguir Siguiendo
    • AMANECE EN MERCURIO
    • ¿Ya tienes una cuenta de WordPress.com? Accede ahora.
    • AMANECE EN MERCURIO
    • Personalizar
    • Seguir Siguiendo
    • Regístrate
    • Acceder
    • Denunciar este contenido
    • Ver sitio web en el Lector
    • Gestionar las suscripciones
    • Contraer esta barra
 

Cargando comentarios...
 

    A %d blogueros les gusta esto: